¡¿Donde habrá abrigo a vos?!
Los muros que cobijan tus deseos destiñen soledad.
El tiempo, la cal, los manteles. Las manos ásperas y resecas.
Los perros vacunados contra la deslealtad.
Fragancia a pan, chapas de cartón.
Lleve mi astro por caminos sinuosos de polvo y viento norte,
y siempre el sol, marchitandome
y siempre el aire, y siempre...
Caigo a tus pies.
Soy el pasado.
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